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Hoy habían muchas cosas por hacer, llamar al escultor por la estatua, crear el laberinto y preocuparnos de la planta exótica.
Comenzamos por este último, pidiéndole a Robbie que construyera un soporte que ayudara al brote a crecer recto y fuerte:
Y, ¿recuerdan a las hormigas de ayer? Pues recibimos una carta de la Sociedad Humana de Mariposas, agradeciendo nuestro cuidado... ¡Qué considerados!
Pero ya era hora de encargarnos del laberinto… para lo cual plantamos unos arbustos siguiendo el plano que encontramos:
Rich nos recomendó pavimentar los caminos, para que nadie tropezara al recorrerlos:
Al fin llegó la hora de ocuparnos de la gran escultura del centro. Ayer Colín nos dio el nombre de un escultor que podría ayudarnos con la estatua, se llama Jean-Louis. Al menos tiene nombre de artista. Lo invitamos para que examinara la estatua y nos diera su opinión y al parecer le gustó la idea de restaurarla. Le pedimos a Claire que la pusiera en un lugar más adecuado para trabajar.
Pero el escultor solicitó escuchar música para inspirarse, para lo cual conseguimos un gramófono donde pudiera escuchar sus discos. Y comenzó la renovación de la estatua, claro que Jean-Louis no quiso que viéramos el resultado hasta mañana.
Y en cuanto al gramófono, lo pusimos en la terraza para escuchar música de vez en cuando:
